Las Escaleras al Cielo de Hawai, en la isla de Oahu, se han convertido en una de las principales atracciones turísticas en Honolulu, a pesar de estar cerradas al público y de ser sumamente peligrosas. Sin embargo, el esfuerzo compensa a los visitantes más valientes con vistas únicas, ya que se trata de un recorrido que atraviesa varias montañas de la isla oceánica. Su nombre en inglés, «Stairway to Heaven«, no decepciona: a medio camino, el resto del tramo parece desvanecerse entre la bruma del amanecer y no sabes si las escaleras acabarán en el mismísimo cielo o en las nubes.
Qué son las Escaleras al Cielo de Hawai
La historia de uno de los senderos más impresionantes del mundo comenzó en plena Segunda Guerra Mundial. Estados Unidos contrató a una empresa en 1942 para que construyera una estación de radio en las montañas de Oahu. Esta estación de radio sería secreta y serviría al ejército estadounidense para comunicarse con su flota que en esos momentos se encontraba realizando maniobras en el Pacífico. Los obreros construyeron un camino de escaleras de madera en las montañas para facilitar el acceso a la nueva base del ejército. Más tarde, estas escaleras caerían en el olvido ya que, una vez finalizada la construcción de la base, los trabajadores prefirieron tomar un teleférico que les llevara hasta su estación de trabajo. En esos años, algunos tramos fueron reconstruidos con metal.
Tras finalizar la Segunda Guerra Mundial, el lugar fue usado como un sistema de navegación. Finalmente, en el año 1987, Hawaii puso fin a las actividades en el edificio, así como a la ruta que llevaba hasta él. Eso no fue un obstáculo para turistas y lugareños que hicieron oídos sordos a las prohibiciones en su deseo de recorrer dicho sendero.
En el año 2003, los 3.922 escalones fueron reparados por el ayuntamiento de Honolulu. Sin embargo, desde ese año no se ha vuelto a llevar a cabo ninguna obra en el sendero, a pesar de que en el año 2015, tras una fuerte tormenta, parte de los escalones desaparecieron. Así se explica el nivel de dificultad del terreno: si realizas el recorrido por la madrugada (momento recomendado) te vas a exponer a problemas de visibilidad y puede que un paso en falso signifique tu caída por un precipicio.
La ciudad de Hawaii sigue debatiendo si sería adecuado abrir las escaleras al público. Su único miedo es someterse a demandas de personas que puedan sufrir accidentes en el sitio.
Gran atracción para los turistas, a pesar de permanecer cerradas al público
El recorrido lleva tres décadas cerrado al público, pero aún así decenas de visitantes saltan las vallas cada día para adentrarse en estos fascinantes paisajes. Hay varios problemas para llegar hasta el lugar:
- Los vecinos están en contra. No quieren a turistas aparcando por sus calles y han conseguido que la ciudad ponga señales de «Prohibido Aparcar» por sus calles, por lo que llegar en coche hasta el lugar no es sencillo. También cabe la posibilidad de que los vecinos llamen a la policía.
- Hay un guarda de seguridad encargado de custodiar las entradas al sendero. Sin embargo, parece que estos guardas están acostumbrados a lidiar con los transeúntes a diario, porque según he podido leer en varios blogs, lo único que hacen es pedir a la gente que se marche del lugar. A continuación, puedes intentar entrar por otra puerta.
- La policía. Si, finalmente, la policía te «pilla» en el lugar, entonces te citarán para ir a juicio. A pocas personas les ha pasado esto, pero normalmente si caes en las garras de un policía acabarás pagando una multa de unos 1.000 dólares.
Shingo M. en Yelp.
Cómo llegar a las Escaleras al Cielo
Si a pesar de toda esta información, sigues queriendo adentrarte por las Escaleras al Cielo de Hawai, hay varias webs, entre ellas Yelp, donde puedes ver consejos de otros visitantes sobre cómo llegar y evitar que te pillen.
Lo más recomendado es comenzar de madrugada, sobre las 5AM, con una linterna. Aún así, recuerda que se trata de una actividad con un elevado riesgo. Suele estar nublado a esas horas de la mañana y es difícil reconocer el camino que tienes por delante. Además, hay varios escalones que han sucumbido a las tormentas. Un paso en falso podría resultar un peligro auténtico.
También hay varios lugareños que se ofrecen a llevar a los turistas a cambio de un pago por adelanto, por supuesto. Pero estos guías no son oficiales y no se responsabilizarán de nada que pueda ocurrir durante el recorrido.
A pesar de todos estos puntos negativos, hay que reconocer que las imágenes que dejan las Escaleras al Cielo son más que tentadoras, incluso para las almas con absoluto sentido de la responsabilidad. ¿Te atreves?
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